El glutatión es una sustancia producida naturalmente por el hígado que también está presente en algunos alimentos (frutas, verduras y carnes). Desde un punto de vista químico es un tripéptido formado por los aminoácidos cisteína, glicina y glutamato. El glutatión es conocido principalmente por su función como antioxidante natural producido por el propio cuerpo. En células y órganos participa en diversos procesos, desde la producción y reparación de tejidos hasta la síntesis de proteínas y otras moléculas, pasando por la implicación en el sistema inmunológico. Administrado directamente en una vena, se utiliza para reducir los efectos de los tratamientos de quimioterapia contra el cáncer y contra el Parkinson, la diabetes, la anemia asociada a la diálisis, la aterosclerosis y los problemas de fertilidad masculina. Por inhalación, el glutatión se propone en cambio, por ejemplo, en el tratamiento de enfermedades pulmonares.